Cómo cuidar la salud bucodental y prevenir enfermedades: consejos, hábitos, productos, etc.

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Publicado en 29/02/2024

La salud bucodental es muy importante para nuestra salud general y nuestro bienestar. Una boca sana nos permite comer, hablar, sonreír y expresarnos con confianza y comodidad. Además, una buena higiene bucal nos ayuda a prevenir enfermedades e infecciones que pueden afectar a otras partes del cuerpo, como el corazón, el cerebro o las articulaciones. Por eso, es fundamental cuidar la salud bucodental y adoptar hábitos saludables que nos permitan mantener una sonrisa bonita y sana durante toda la vida. En este artículo, te vamos a dar algunos consejos, hábitos, productos y recomendaciones para que cuides tu salud bucodental y prevengas enfermedades como la caries, la gingivitis, la periodontitis o el cáncer oral. ¡Sigue leyendo y toma nota!

Consejos para cuidar la salud bucodental

Cepíllate los dientes al menos dos veces al día durante dos minutos cada vez. Usa un cepillo de cerdas suaves y una pasta dental con fluoruro. El cepillado elimina la placa bacteriana que se acumula en los dientes y las encías y que puede causar caries, inflamación, sangrado y pérdida de piezas dentales. Recuerda cambiar el cepillo cada tres meses o cuando las cerdas estén desgastadas.
Usa hilo dental todos los días para limpiar los espacios interdentales donde el cepillo no llega. El hilo dental ayuda a prevenir la formación de sarro, que es la placa endurecida que se adhiere a los dientes y que solo se puede eliminar con una limpieza profesional. El sarro puede provocar irritación, infección y retracción de las encías, lo que aumenta el riesgo de perder los dientes.
Enjuágate la boca con un colutorio adecuado para tu tipo de boca y tus necesidades. El colutorio complementa la acción del cepillado y el hilo dental, ya que refresca el aliento, elimina las bacterias, protege el esmalte, previene la caries y fortalece las encías. Elige un colutorio que contenga fluoruro, xilitol, clorhexidina o aceites esenciales, según lo que te recomiende tu dentista.
Visita al dentista al menos una vez al año para hacerte una revisión y una limpieza profesional. El dentista podrá detectar y tratar a tiempo cualquier problema bucodental que puedas tener, como caries, gingivitis, periodontitis, maloclusión, bruxismo, etc. Además, el dentista podrá aconsejarte sobre los mejores productos y tratamientos para tu boca, como empastes, coronas, implantes, ortodoncia, blanqueamiento, etc.
Evita el consumo de tabaco y alcohol. Estos hábitos son muy perjudiciales para la salud bucodental, ya que favorecen la aparición de manchas, halitosis, sequedad, inflamación, úlceras y cáncer oral. El tabaco y el alcohol también afectan al sistema inmunológico y dificultan la cicatrización y la regeneración de los tejidos bucales. Si quieres dejar de fumar o de beber, consulta con tu médico o con un especialista que te pueda ayudar.

Hábitos para cuidar la salud bucodental

Mantén una dieta equilibrada y variada. La alimentación es clave para la salud bucodental, ya que los nutrientes que ingerimos influyen en la formación, el desarrollo y la resistencia de los dientes y las encías. Consume alimentos ricos en vitaminas, minerales, antioxidantes y fibra, como frutas, verduras, cereales integrales, legumbres, frutos secos, lácteos, huevos, pescado, etc. Estos alimentos aportan calcio, fósforo, magnesio, hierro, zinc, flúor, vitaminas A, C, D y K, que son esenciales para la salud bucodental.
Reduce el consumo de azúcares y alimentos ácidos. Estos alimentos son los principales enemigos de la salud bucodental, ya que dañan el esmalte dental y favorecen la proliferación de bacterias que causan la caries. Evita o limita el consumo de dulces, caramelos, chocolates, galletas, pasteles, refrescos, zumos, vinagre, limón, etc. Si los consumes, hazlo con moderación y preferiblemente durante las comidas, no entre horas. Después, cepíllate los dientes o enjuágate la boca con agua para neutralizar el efecto ácido.
Bebe agua con frecuencia. El agua es el mejor aliado para la salud bucodental, ya que hidrata la boca, limpia los dientes, elimina los restos de comida, estimula la producción de saliva y previene la sequedad bucal. La sequedad bucal puede provocar mal aliento, caries, infecciones y dificultades para masticar, hablar y tragar. Bebe al menos dos litros de agua al día y evita las bebidas azucaradas, carbonatadas, alcohólicas o con cafeína, que pueden deshidratar la boca y dañar los dientes.
Mastica chicle sin azúcar después de las comidas. El chicle sin azúcar es un buen complemento para la higiene bucodental, ya que ayuda a eliminar los restos de comida, aumenta el flujo de saliva, neutraliza los ácidos, refresca el aliento y previene la caries. Elige un chicle que contenga xilitol, un edulcorante natural que tiene propiedades antibacterianas y anticaries. No mastiques el chicle más de 10 minutos y no lo uses como sustituto del cepillado.

Productos para cuidar la salud bucodental

Elige un cepillo de dientes adecuado para tu boca. Existen diferentes tipos de cepillos de dientes según el tamaño, la forma, el material y la dureza de las cerdas. Lo más recomendable es usar un cepillo de tamaño medio, con la cabeza redondeada, las cerdas suaves y el mango ergonómico. También puedes optar por un cepillo eléctrico, que tiene un movimiento rotatorio que facilita la limpieza y el acceso a las zonas más difíciles. Sea cual sea el cepillo que elijas, recuerda cambiarlo cada tres meses o cuando las cerdas estén desgastadas.
Usa una pasta dental con fluoruro. El fluoruro es un mineral que refuerza el esmalte dental y lo protege de la acción de las bacterias que causan la caries. La mayoría de las pastas dentales contienen fluoruro, pero hay que fijarse en la cantidad y la concentración. Lo ideal es usar una pasta dental con una concentración de fluoruro de entre 1000 y 1500 ppm (partes por millón). También hay pastas dentales específicas para cada tipo de boca y necesidad, como blanqueadoras, sensibles, antisarro, etc. Consulta con tu dentista cuál es la más adecuada para ti.
Utiliza un irrigador bucal. El irrigador bucal es un aparato que emite un chorro de agua a presión que limpia los dientes y las encías de forma profunda y eficaz. El irrigador bucal es especialmente útil para las personas que tienen implantes, ortodoncia, prótesis o puentes, ya que les ayuda a eliminar los restos de comida que se quedan atrapados entre los aparatos. El irrigador bucal no sustituye al cepillado ni al hilo dental, sino que lo complementa. Usa el irrigador bucal una vez al día, después del cepillado y el hilo dental, y ajusta la presión según tu sensibilidad.
Aplica un gel o una crema dental. El gel o la crema dental son productos que se aplican directamente sobre los dientes y las encías para tratar o prevenir problemas específicos, como la sensibilidad, la erosión, la inflamación, el sangrado, las aftas, etc. El gel o la crema dental contienen ingredientes activos que actúan sobre la zona afectada, aliviando el dolor, regenerando el tejido, cicatrizando las heridas, etc. Usa el gel o la crema dental según las indicaciones de tu dentista o del fabricante, y no los mezcles con la pasta dental.

Estos son algunos de los consejos, hábitos y productos que te ayudarán a cuidar tu salud bucodental y prevenir enfermedades. Una boca sana es sinónimo de una vida sana, y que tu sonrisa es tu mejor carta de presentación. Por ello, recuerda visitar regularme a tu dentista. ¡Es tu mejor aliado a la hora de cuidar tu sonrisa!

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